Ambos sabemos que la lactancia es una experiencia tan bonita y transformadora como intensa. Por otro lado, una vez finalizada, muchas veces os preguntáis qué podéis hacer para recuperar el pecho después de amamantar a vuestro bebé.
Cambios en el volumen, en la firmeza, en la forma… todo esto es normal, por lo que voy a profundizar para que entiendas qué ocurre, qué es esperable y qué soluciones existen, desde cuidados básicos hasta cirugías plásticas. Veamos cómo recuperar el pecho después de la lactancia.
¿Cuánto tarda el pecho en recuperarse después de la lactancia?
En general, el pecho puede tardar entre 3 y 6 meses en estabilizarse tras el destete. Durante ese periodo, es normal que lo notes más vacío, flácido o incluso con pequeñas molestias internas mientras su estructura vuelve a reorganizarse. El intervalo es de 3 meses porque cada uno vamos a nuestro ritmo, dependiendo de varios factores:
- Duración de la lactancia.
- Tu edad.
- La cantidad de tejido glandular que ya tenías antes.
- Genética.
- Cambios de peso durante el embarazo.
- Tu elasticidad de piel.
Dicho esto, debes tener claro que la recuperación natural no siempre devuelve el pecho a su estado previo al embarazo. No quiere decir que haya un problema, simplemente tu cuerpo ha cambiado, al igual que puede pasar por con el abdomen o las caderas.
Si después de esos meses tu pecho sigue sin tener volumen, sin firmeza o sin forma, entonces es cuando solemos valorar opciones como una mastopexia, un aumento de pecho o una combinación de ambas, pero tampoco hay que adelantarse.
Me he quedado sin pecho después de la lactancia
Es cierto que muchas os quedáis sin pecho después de la lactancia y, aunque por supuesto cada mujer lo vive de forma diferente, tiene una explicación fisiológica.
Durante el embarazo y la lactancia, la glándula mamaria aumenta para producir leche. Al terminar la lactancia, ese tejido disminuye y a eso se suma que la piel, que había estado distendida, queda más laxa. El resultado puede ser un pecho más vacío o forma caída, una falta de volumen en el polo superior, una asimetría más visible o sensación de piel sobrante.
Esto no impide que puedas recuperar la forma, firmeza o volumen que buscas, así que vamos a ver cómo recuperar el pecho después de la lactancia.
Cuidados y ejercicios
Cuidarse y hacer ejercicio tiene sus limitaciones incluso cuando el cambio es leve o moderado, pero puede ayudar bastante. No van a elevar el pecho de forma increíble, pero sí pueden mejorar la calidad de la piel, el tono muscular y cómo te percibes. Por lo tanto, os recomiendo el colágeno por un lado, y aceites naturales para mejorar la elasticidad.
El pecho como tal no puede muscularse, porque es tejido graso y glandular, pero los pectorales sí. Fortalecerlos da mejor sujeción y una apariencia más firme. Os recomiendo estos ejercicios:
- Flexiones. Las podéis hacer inclinadas si acabáis de empezar, os ayudarán a fortalecer los pectorales, brazo y hombros.
- Press de pecho. Puedes hacerlo con mancuernas o con barra, tonificaréis la zona del pecho.
- Elevaciones de hombro, sobre todo las frontales. Bastante sencillo pero eficaz para mejorar toda la parte superior del cuerpo.
- Apertura de pecho. Si lo haces con mancuernas lo puedes hacer tumbada en el suelo o con un banco inclinado, aunque en los gimnasios por lo general tenéis una máquina específica para esto.
- Pilates. Además de fortalecer vuestros músculos, os ayudarán a mejorar la postura, algo que marca la diferencia en la apariencia de los pechos.
- Yoga activo.
- Natación.
Mastopexia
Cuando el pecho ha perdido firmeza y se nota caído, la mastopexia es la técnica indicada. La mastopexia reposiciona el pecho donde debería estar y elimina la piel sobrante. Se indica esta cirugía cuando tienes el pecho vacío pero hay volumen de sobra, hay una caída evidente o si el pezón apunta hacia abajo.
La mastopexia puede hacerse con o sin prótesis, según el volumen que busques. Si te gustaba tu volumen antes del embarazo, normalmente no necesitas prótesis. Si además buscas recuperar esa forma redondeada del polo superior, sí se suele recomendar.
Aumento de pechos
Se indica el aumento de pecho cuando el volumen ha disminuido significativamente después de la lactancia. El aumento puede realizarse solo con implantes, con grasa propia (lipofilling) o combinando ambas técnicas.
El lipofilling es una buena opción cuando solo quieres un aumento natural y muy moderado. Los implantes permiten un cambio más definido y una forma más proyectada.
¿Es normal que me quede sin senos después de la lactancia?
Sí, es completamente normal. El pecho está formado por tejido glandular y tejido graso. Durante la lactancia, el cuerpo dirige recursos a la glándula mamaria para producir leche. Una vez la lactancia termina, ese tejido se reduce.
Algunas mujeres recuperan parte del volumen graso, otras no. Y ambas situaciones son totalmente fisiológicas. Lo importante es que comprendas que no tiene nada que ver con que hayas dado el pecho más tiempo o menos, ni con haber tenido poca o mucha leche. Es simplemente cómo responde el cuerpo de cada mujer.
Además, como ves, si te preocupa este cambio y quieres mejorar la forma o el volumen hay soluciones muy eficaces y permanentes.
Mejor forma de recuperar el pecho después de la lactancia
La mejor forma de recuperar tu pecho es juntando un buen cuidado y ejercicios durante la etapa de lactancia, con una mastopexia tras el periodo de recuperación. Si quieres un resultado visible, natural y permanente, lo más efectivo es:
- Mastopexia para elevar y recolocar el pecho.
- Aumento mamario solo si has perdido volumen.
- Cuidado de la piel para mejorar la textura.
- Ejercicios de pectoral para un mejor soporte interno.
Así consigues una transformación del pecho con aspecto natural. Esto funciona muy bien porque los ejercicios mejoran el soporte muscular, la mastopexia recoloca el tejido y quita la piel sobrante y con los cuidados de colágeno mejoras la elasticidad y calidad de la piel.
Mis consejos para después de la lactancia
Para complementar bien los cuidados y ejercicios que os he comentado antes, quiero daros unas recomendaciones para evitar en la medida de lo posible que os quedéis sin pecho tras la lactancia, así no habrá un deterioro prematuro.
1. Buena alimentación
Una piel bien nutrida siempre se recupera mejor, por lo que debes meter en tu dieta alimentos ricos en vitamina C, que te ayudan a sintetizar el colágeno, omega 3 para mejorar la elasticidad y proteínas para la reparación de tejidos.
2. Hidratación
Debes beber bastante agua, por lo menos 2 litros al día, te ayudará a mantener la calidad de la piel y además, en la forma en la que el cuerpo redistribuye la grasa.
3. Usa un Sujetador adecuado
Usar un sujetador de soporte, sobre todo en los meses posteriores a la lactancia, ayuda a que la piel no cargue tanto con el peso.
4. Cuida la postura corporal
Los hombros hacia adelante hacen que el pecho parezca más caído. Una postura erguida cambia muchísimo la percepción visual.
5. Cuidado con los cambios bruscos de peso
Engordar y adelgazar rápido es una de las cosas que más afecta al pecho, más aún si la piel ya viene estresada del embarazo, por lo que es un motivo más para cuidar la alimentación y mantener una buena hidratación.
6. Ejercicio moderado pero constante
No tienes por qué entrenar todos los días, con 3 sesiones semanales es más que suficiente para que notes cambios en la firmeza general del torso.
¿Cuánto debo esperar para recuperar el pecho con cirugía tras la lactancia?
Mi recomendación es que esperes entre 3 y 6 meses tras terminar la lactancia. Se debe esperar porque el pecho aún está cambiado, y hacer una cirugía demasiado pronto puede llevar a un resultado que después no se adapte a la forma final del pecho.
También hay que asegurarse de que no sigas produciendo leche, ya que operar mientras la glándula está activa aumenta el riesgo de complicaciones. Por último, la piel necesita tiempo para retraerse, por lo que cuanto más estabilizado esté, más preciso será el resultado quirúrgico.
Recuperar el pecho después de la lactancia es totalmente posible. Cada mujer vive el cambio de una manera distinta, pero lo que sí es común es la búsqueda de volver a sentirse cómoda con su cuerpo.
Los cuidados y ejercicios pueden ayudarte a mejorar la apariencia, pero cuando hay pérdida significativa de volumen o caída, las soluciones más efectivas son la mastopexia, el aumento de pecho, o una combinación de ambas.
















