Lifting de muslos y brazos
¿Qué es la cruroplastia? ¿Y la braquioplastia?
La cruroplastia (lifting de muslos) o braquioplastia (lifting de brazos) es una cirugía que corrige la flacidez en la cara interna de los muslos y brazos. Consiste en la extirpación de piel y grasa de dichas zonas. En aquellos casos en los que además de la flacidez hay un exceso adiposo, se combina con liposucción.
La cicatriz resultante puede variar en función de las características de cada paciente, desde quedar escondida en el pliegue inguinal o axilar hasta ser necesaria una cicatriz vertical oculta en la cara interna de los brazos o muslos.
Es muy habitual su realización en aquellas personas que han sufrido pérdidas importantes de peso o en personas que por la edad han perdido el tono natural de la piel. Los resultados hablan por sí solos.
General.
Variable.
15 días.
120 minutos.
1 día.
1 mes.
¿Cuánto dura la intervención para tratar la flacidez de muslos y brazos?
La duración de un lifting de muslos y brazos va a depender de la complejidad de cada caso, pero la cirugía suele durar dos horas, hasta un máximo de tres. Durante este tiempo:
- Se realiza una planificación precisa, marcando las áreas a tratar.
- Se efectúan las incisiones necesarias para eliminar el exceso de piel y grasa.
- Se realizan todas las suturas.
¿Cuándo está recomendado realizar un lifting de muslos?
El lifting de muslos y brazos es especialmente bueno para personas que presentan:
- Flacidez excesiva en la piel de los muslos, causada por envejecimiento o por pérdida de peso.
- Acumulación localizada de grasa que no mejora con dieta ni ejercicio.
- Incomodidad física o irritaciones en la piel debido al roce constante en esta área.
Así pues, se recomienda la cruroplastia y la braquioplastia para recuperar la firmeza en tus muslos y mejorar tu calidad de vida, siendo una solución tan efectiva como segura.
Incisiones de una cruroplastia y braquioplastia
Tanto en la cruroplastia como en la braquioplastia, realizamos las incisiones con cuidado para minimizar las cicatrices y lograr resultados naturales. Las técnicas usamos son:
- Incisión en la parte interna del muslo: Ideal para tratar casos leves o moderados de flacidez.
- Incisión extendida: Utilizada en casos más avanzados, permitiendo una mayor eliminación de piel y grasa.
- Incisión en la zona inguinal: Diseñada para que la cicatriz quede oculta en pliegues naturales de la piel.
Cicatrices por lifting de muslos y brazos
Las cicatrices son una parte inevitable de cualquier procedimiento quirúrgico, incluido el lifting de muslos y brazos. Sin embargo, con una planificación adecuada y un cuidado postoperatorio, las cicatrices son mucho menores. En estas intervenciones, se prioriza colocar las incisiones en zonas discretas para que las marcas sean lo menos visibles posible.
Lifting de muslos (Cruroplastia)
Como hemos comentado, las cicatrices son variables, pero en el lifting de muslos, las cicatrices suelen estar:
- En la parte interna del muslo. En casos leves, la cicatriz puede limitarse a la zona inguinal, quedando oculta en los pliegues naturales.
- A lo largo del muslo interno. En casos más severos de flacidez o exceso de piel, la incisión puede extenderse desde la ingle hasta la rodilla.
Con el paso del tiempo, las cicatrices tienden a atenuarse, pasando de ser rojizas o moradas a líneas más claras. Es fundamental seguir las recomendaciones del cirujano, como evitar la exposición directa al sol y aplicar productos cicatrizantes específicos.
Lifting de brazos (Braquioplastia)
En la braquioplastia, las cicatrices generalmente se localizan en la parte interna de los brazos o en la axila. Esto las hace menos visibles cuando los brazos están en una posición natural. Las técnicas avanzadas permiten reducir la extensión de las incisiones siempre que sea posible.
El cuidado postoperatorio, que incluye masajes, el uso de vendajes compresivos y tratamientos tópicos, es clave para favorecer una cicatrización óptima.
Preguntas frecuentes
El descanso postoperatorio es esencial para que tengas una recuperación lo más segura y cómoda posible tras una cruroplastia. Mis recomendaciones son:
- Posición boca arriba. Durante las primeras semanas, lo recomendable es dormir de espaldas para evitar presión sobre las zonas intervenidas. Esto protege las incisiones y favorece la cicatrización.
- Uso de almohadas. Coloca almohadas debajo de las rodillas para mantener las piernas ligeramente flexionadas. Esto ayuda a reducir la tensión en la piel de los muslos y mejora la circulación.
- Cama reclinable o respaldo elevado. Si es posible, utiliza una cama reclinable o coloca almohadas adicionales para mantener el torso en una posición semi-incorporada, esto te ayudará con la inflamación.
- Evita dormir de lado o boca abajo. Estas posiciones pueden ejercer presión innecesaria sobre las áreas tratadas, incrementando las molestias y el riesgo de complicaciones.
En resumen, la recomendación general es dormir en una posición reclinable, por lo que lo mejor sería colocar algunas almohadas detrás de la espalda para ayudar a mantener la parte superior del cuerpo elevada. Así, estarás en una posición mucho más cómoda para dormir, pero también tendrás una mejor recuperación y resultados.
Tras una braquioplastia, los brazos lucen más estilizados, firmes y con un contorno más tonificado y rejuvenecido.
Es bueno recordar que el contorno definitivo de los brazos se aprecia a los pocos meses, ya que puede haber hinchazón inicial. También pueden quedar cicatrices, pero estas se vuelven progresivamente menos visibles con el tiempo. Además, al ubicarse en zonas discretas, serán más fáciles de ocultar.